DECLARACION DE AMOR
Las algas marineras y los peces,
testigos son de que escribí en la arena
tu bienamado nombre muchas veces.
Testigos las palmeras litorales,
porque en sus verdes troncos melodiosos
grabó mi amor sus claras iníciales.
Testigos son la luna y los luceros
que me enseñaron a esculpir tu nombre
sobre la proa azul de los veleros.
Sabe mi amor la página de altura
de las gaviotas en cuyas grises alas
definí con suspiros tu hermosura.
Y los cielos del sur que fueron míos
y las islas del sur cuando a buscarte
arribaba mi voz en los navíos.
Y la diestra fatal del vendaval
y todas las criaturas del océano
y el paisaje total del litoral.
Tú, solo de la mar niña a quien llamo
ola para el naufragio de los besos,
puerto de amor, no sabes que te amo.
Para que tú lo sepas: yo lo digo
y pongo al mar inmenso por testigo.
Helcías Martán Góngora