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25 feb 2012

Mariposa rica en tintes y en donaires





De pronto yo, Rafael Duque Naranjo, entomólogo frustrado, buscando mariposas por los patios de las casas y las fincas de mi pueblo, encontré la “Heliconius Erato”, vulgarmente denominada el “Pequeño Cartero”.



Recordé también la poesía que la señorita María Isaza me obligó aprender de memoria hace sesenta años: “Mariposa vagarosa, rica en tintes y en donaires, qué haces tú de rosa en rosa, de qué vives en el aire?.
-Yo de flores y de olores, de espumas de la fuente y del sol resplandeciente que me viste de colores”.


El profesor Guillermo Arango Sereno, biólogo, ajedrecista, entomólogo, estudioso de la microbiología, dos años en el Amazonas en un estudio de campo con la Universidad de Tulane, docente ambiental de Agricultura Orgánica y catorce años en el CIAT; me indicó los nombres científicos y las familias de algunas especies de mariposas.


Por las laderas del “Alto de la Cruz”, encontré libando flores a la “Siproeta Epaphus L” o sea en términos comunes “la achocolatada de raya blanca” que vive en Sevilla rondando el alimento de las flores del cafeto.


Entonces comprendí la importancia de estimular en Sevilla la formación de corredores biológicos en los alrededores de los cafetales promoviendo el crecimiento de árboles de sombrío como carboneros, guamos, plátano, guadua y aún guayacanes, nogales y cedros. 


Se hace también necesario la conservación de la vegetación existente en los bordes de los cultivos o carreteras, comúnmente llamada “rastrojo” que es un componente básico en la conservación de la biodiversidad tanto de insectos como de plantas y aves. Además, la mayoría de los lepidópteros (mariposas) se alimentan de plantas silvestres y unas pocas de plantas cultivadas. Las plantas hospedantes pueden sembrarse en áreas no cultivadas donde no compitan con los cultivos.


La lucha indiscriminada contra las plagas afecta las poblaciones de lepidópteros. Cuando se aplican insecticidas se eliminan las plantas hospedantes de las cuales se alimentan las larvas y al destruirles el alimento las larvas mueren o migran buscando alimento.


Las mariposas adultas consumen frutas fermentadas o materia orgánica en descomposición o son atraídas por el olor que éstas producen. Los mangos, las guayabas, los bananos y los plátanos son frutas que atraen a las mariposas y que normalmente abundan en las fincas cafeteras. Podríamos elaborar alimentadores fabricados con cañutos de guadua en los cuales se podría colocar una solución de miel con trocitos de caña de azúcar o banano.

Sevilla Valle 25 de Febrero de 2012
Textos, video y fotografías: rafaelduquenaranjo@yahoo.es
Asesoría Técnica: silvio.parra@hotmail.com